La principal pregunta de quienes tienen un tatuaje y quieren eliminarlo es ¿realmente puede borrarse sin dejar huella de su paso por la piel? La respuesta hoy en día es: como norma general, sí. Algunos factores pueden hacer que puedan quedar restos de tinta, como por ejemplo la composición de ciertas tintas, determinados colores difíciles de eliminar como el amarillo o el blanco, o características de la piel de algunos pacientes. Pero, en general, sí es posible.
¿Cuándo comienzan a apreciarse los resultados al eliminar un tatuaje?
Los primeros resultados pueden empezar a verse tras la primera sesión, y continúan de forma progresiva tras cada sesión.
¿Se trata de un proceso doloroso?
Es otra de las dudas más frecuentes: no todas las personas sienten el mismo dolor ante un mismo estímulo. Lo más frecuente con el láser de eliminación de tatuajes es una sensación similar a la sentida en el propio tatuaje, aunque a veces es menor y a veces algo mayor.
De todas formas, si es necesario, los profesionales de Canarias Dermatológica emplearán el medio más apropiado para reducir la molestia en cada paciente, como la aplicación de frío, crema anestésica, o si fuera necesario, anestesia local.
¿Cuántas sesiones necesitaré?
Eso depende de muchos factores: el tamaño del tatuaje, el tiempo que hace que se ha realizado, la variedad y número de colores tatuados, la composición de las tintas, la técnica y profundidad empleada por el tatuador, el color natural de la piel, y la tecnología laser de la que se disponga.
Hay tatuajes que desaparecen con 6 sesiones o menos, aunque no es raro que el número de sesiones requerido sea mayor, y esto no se puede predecir fácilmente en el inicio del tratamiento: sólo se puede hacer una estimación aproximada antes de comenzar las sesiones, mediante un control médico dermatológico del tatuaje y la piel en la que está, para programar así el tratamiento laser más eficaz y seguro para cada paciente.
¿Cuánto duran las sesiones?
Es muy variable, según el tamaño del tatuaje a eliminar, la complejidad del diseño y la necesidad o no de aplicar anestesia, entre otros factores. Pero muchas sesiones no duran más de 20 minutos.
El intervalo mínimo entre sesiones es de 6 a 8 semanas. De esa forma se da tiempo a que el sistema linfático elimine las partículas de tinta tras cada sesión. En ciertos casos (oposiciones con un plazo exigido, etc) se puede valorar la opción de tratamientos intensivos, pero siempre bajo criterio médico y de acuerdo con el paciente.
¿Me quedará cicatriz u otras marcas por el tratamiento?
El láser que utilizamos no actúa sobre la piel, sino sobre las partículas de tinta, fragmentándolas en otras de tamaño menor, que pueden eliminarse por el sistema linfático.
Por lo tanto es poco probable que aparezcan marcas permanentes en la piel. Además la tecnología de la que disponemos reduce la cantidad de energía laser necesaria para eliminar el tatuaje, y las sesiones son realizadas por nuestro equipo médico y sanitario especializado, para el correcto seguimiento de todo el proceso.
Después de conocer esta información, si aún tienes alguna duda sobre el proceso para eliminar tu tatuaje, pide cita en Canarias Dermatológica y nuestros especialistas te ofrecerán toda la información que necesites saber.