Los piojos adultos y los piojos pequeños son fáciles de eliminar, pero eliminar sus huevos (liendres) es mucho más difícil, y es por esto que ocasionan más problemas. Una vigilancia constante y la visita a un especialista es necesaria para ganarle la batalla y evitar los piojos.
Los piojos son unos de los problemas a los que las madres se enfrentan todos los años, se suelen encontrar en la cabeza, son insectos sin alas que viven en el cabello de los seres humanos y se alimentan de cantidades extremadamente pequeñas de sangre.
Los piojos no son peligrosos
Los piojos no son peligrosos, y no propagan ninguna enfermedad, pero siempre se contagian de persona a persona ya que pueden pasar de la cabeza de una persona a otra con facilidad. Además, son molestos ya que sus picaduras pueden producir picazón.
Algunas de las consecuencias que trae el tener piojos es la piel irritada, por ese motivo hay que tratarlos lo antes posible y poner remedio ya que la irritación en la cabeza puede provocar que la piel se infecte.
Los piojos sobreviven hasta 30 días en la cabeza de una persona y pueden poner hasta ocho huevos por día. Dado que los piojos se reproducen rápidamente, es una buena idea tratarlos lo antes posible. Algunas personas que tienen piojos también pueden sufrir una erupción alérgica, en forma de pequeños bultos rojos, como consecuencia de rascarse. Una de las razones por las cuales los niños se contagian de piojos con facilidad es que tienden a jugar en grupo y compartir cosas.
Los piojos adultos y los piojos pequeños son fáciles de eliminar, pero eliminar sus huevos (liendres) es mucho más difícil, y es por esto que ocasionan más problemas. Una vigilancia constante es necesaria para ganarle la batalla a los piojos.
Es imprescindible tener un buen asesoramiento en una clínica dermatológica donde nos pueden aconsejar el tratamiento y la prevención para los piojos, de esta manera estaremos más informados de los pasos a seguir. Normalmente la forma más común para luchar contra estos insectos es en primer lugar cepillar bien el pelo. Aplicar un tratamiento al cabello y cuero cabelludo, dejar que el tratamiento actúe durante el tiempo recomendado. Lavar el tratamiento utilizando agua. Después del tratamiento inicial, es también muy importante lavar con agua muy caliente toda la ropa, gorros, sábanas, fundas de almohadas, peluches, y cualquier otro objeto de tela con el que el niño haya entrado en contacto.
Se debe vigilar constantemente el cabello durante las próximas 8 horas para ver que no hayan quedado piojos. Los huevos de los piojos nacen en ciclos, y es casi imposible eliminarlos a todos de una sola pasada.
Algunos consejos a parte del que te pueda dar un especialista es tener en cuenta por ejemplo el hecho de compartir sobreros. No utilizar el peine o cepillo de otra persona.
Hay que leer bien todas instrucciones de los spray que utilices para combatir los piojos, recuerda que son pesticidas, y puedan penetrar en el cuero cabelludo, motivo muy importante por el que se debe visitar a un especialista.