Cada 18 de octubre se celebra el Día Mundial de la Menopausia tras el acuerdo alcanzado entre la Sociedad Internacional de la Menopausia (SIM) y la Organización Mundial de la Salud (OMS). La conmemoración de este día tiene por objeto ayudar a crear conciencia sobre la importancia de la evaluación de la salud de las mujeres y de la prevención de enfermedades durante este periodo de su vida.
En el blog de Canarias Dermatológica, ya te hemos hablado en anteriores artículos sobre la necesidad de prestar una atención especial a la piel durante la menopausia, pero hoy queremos recordarte la importancia de llevar a cabo algunas recomendaciones para que esta importante etapa no se asocie a una pérdida en calidad de vida.
¿Qué le sucede a la piel durante la menopausia?
Durante la menopausia, el cuerpo de la mujer produce cada vez menos cantidad de las hormonas llamadas estrógeno y progesterona y esto se observa en la piel, ya que pierde elasticidad y se aprecia seca y con aspecto rugoso. Las fibras de elastina y colágeno se degradan y la piel se descuelga provocando mayor flacidez y la aparición de arrugas.
Además de esto, se producen alteraciones en la grasa, en la sudoración, aparecen cambios de pigmentación o dilataciones vasculares, las mucosas pierden su grado de humedad, las uñas se vuelven más frágiles y crecen con más lentitud, el pelo se vuelve más fino, aumenta el vello facial, etc.
Recomendaciones para el cuidado de la piel en esta etapa
Sin embargo, a pesar de la aparición de los síntomas anteriormente descritos, puedes llevar a cabo medidas como las que te proponemos a continuación para hacer frente a estos importantes cambios que se producen en tu cuerpo.
- Practicar ejercicio físico diariamente durante 30 ó 60 minutos (ejercicio aeróbicos, sin exceso de peso y con estiramientos).
- Ocio activo: un estudio realizado en mujeres peri y post menopáusicas entre 46 y 62 años, valoró mediante un detallado cuestionario los síntomas cutáneos y extracutáneos más frecuentes, encontrando que aquellas mujeres con una educación más elevada, que hacían ejercicio de forma habitual y que mantenían un tiempo libre para actividades creativas intelectuales o no, tenían menos síntomas que las que no cumplían estos requisitos.
- Tratamientos cosméticos: Existen tratamientos dermatológicos que combinados entre sí ayudan a combatir estos efectos negativos en la piel. Uno de ellos es la DermalInfusion, que exfolia, limpia el poro y se infiltra un serum terapéutico consiguiendo resultados inmediatos. Otros tratamientos efectivos son por ejemplo el de mesoterapia virtual, en el que se utilizan vitaminas para hidratar la piel o la radiofrecuencia, que ayuda a activar el colágeno natural para mejorar la flacidez. En esta técnica se utiliza calor a unos 36 grados y, combinada con las anteriores, ayuda a mejorar el aspecto de la piel desde la primera sesión.
En definitiva, dentro del proceso de envejecimiento del ser humano, y concretamente en la mujer, la menopausia es un factor más que puede ser conducido de forma equilibrada para que su impacto sea menor, permitiendo una mejor adaptación de la mujer a esta nueva etapa y sin que ello conlleve una pérdida en su calidad de vida.